Ey, ¿qué tal? Hace días que quiero
escribir en el blog pero últimamente no paro en casa, ¡y menos mal! Mis
compañeros de piso con los que me llevo muy bien no colaboran en las
tareas domésticas de la casa. Mientras yo limpio el salón, ellos se
dedican a ver fotos en TUENTI y a chatear con los amigos, incluso uno de
ellos, se pasa todo el día conectado a Skype para hablar con su novia, ¡es
horrible!
Al principio cuando llegamos, nos
dividíamos las tareas, o sea, estábamos bien organizados. Pero pasadas
unas semanas, todo cambió.
Ahora les tengo que pedir que hagan las
cosas y colaboren en las tareas domésticas para mantener limpio el
espacio común. A Cristina le pido que friegue los platos, a Juan le
ruego que limpie el polvo, a Elena siempre le tengo que mandar que ponga
la lavadora y tienda la ropa y Emad, que se pasa el día subiendo fotos a
Facebook y descargándose videojuegos, le tengo que ordenar que barra el
suelo. En definitiva, la casa es un desastre y es que encima, tengo que
aguantar que vengan sus novios y sus amigos. ¡Esto es una locura!
Porque claro, mi cuarto es mi cuarto y
yo lo tengo como quiero, pero las zonas comunes son eso, comunes y hay
que mantener un orden. ¿Qué puedo hacer?, ¿qué me recomendáis? Necesito
consejos.
Os espero por aquí.
Virginie